La gravedad gobierna los movimientos del cosmos. Junta bandadas de galaxias para formar pequeños grupos y cúmulos de galaxias más masivos, y atrae parejas de galaxias tanto que comienzan a tirar una de otra. Este último escenario puede tener consecuencias extremas, con los componentes del par de galaxias que interaccionan siendo a menudo dramáticamente distorsionados, desgarrados, o llevados a una colisión mutua, abandonando sus identidades anteriores y fusionándose para formar una sola acumulación de gas, polvo y estrellas.