Una nueva investigación dirigida por arqueólogos de la Universidad de Washington, en St. Louis, muestra que la carne y los productos lácteos desempeñaron un papel en la dieta humana en la China de la Edad del Bronce mucho más importante de lo que se pensaba anteriormente. El análisis también sugiere que los granjeros y pastores atendieron a las ovejas y las cabras de manera diferente a como lo hicieron con sus vacas, a diferencia de otras partes del mundo, pues mantuvieron a las vacas más cerca de sus casas y las alimentaron con los subproducto