Bueno, pues parece que, como es tradición, el ejército ruso se ha comportado como una banda de chapuceros que, si ganan, una guerra, es siempre por aplastamiento y casi nunca por habilidad. Ya pasó en la Primera Guerra Mundial, y en la Segunda. Y no iba a ser ahora menos.
Y a pesar de eso, o justamente por eso, creo que Occidente también está haciendo el ridículo con sus argumentos de propaganda. O es eso, o nos toma por gilipollas, cosa nada improbable.
Pongamos varios ejemplos de ambas cosas, y cereo que bastante claros, para cualquiera que sea un poco amigo, o conocido de vista, de la lógica. Empezamos por los rusos:
-Atacan Ucrania de Este a Oeste, cuando todos los ríos corren de Norte a Sur. Que alguien me explique eso. ¿Les apetece cruzar ríos con artillería enfrente? ¿Lo consideran deporte olímpico?
-Atacan un país de cuarenta y tantos millones de habitantes, al que previsiblemente iba a apoyar medio mundo, y lo hacen con una cantidad ridícula de tropas (150.000 hombres, coinciden varias fuentes). Luego la cosa no avanza, y cuando el enemigo recibe refuerzos, retrocedes. Genial, oye. Una finta táctica.
-Dejan pasar siete meses antes de darle leña a las infraestructuras energéticas del enemigo. Ahora se han puesto a ello y la gente se echa las manos a la acbeza. Coño, lo raro es que hayan tardado tanto. Mira lo que tardaron los americanos en dejar a Irak a oscuras...
-No bombardean nudos ferroviarios ni los escasos puentes del Dnieper para evitar que el armemento Occidental llegue al frente.
-Decretan la movilización general tarde, mal y nunca.
Y ahora Occidente:
-Diseñan sanciones que le hacen más daño a ellos mismos que al enemigo. A una parte de ellos mismos, claro. No a todos. Hay otros que se forran.
-Afirman que los bombardeos con misiles son una represalia contra la población, cuando resulta que 100 misiles matan a 15 personas. Lo que viene a ser un minuto bueno en Dresde.
-Y para colmo, exigen incrementar sustancialmente el gasto en defensa. ¿Y para qué vamos a gastar más? ¿Para defendernos de esos chapuceros?
A día de hoy, parece claro que ni las más asustadizas de las viejas temen que Rusia ataque mañana a otro país. ¿Por qué vamos a gastar más? ¿Por qué tenemos que mantener las sanciones? Los rusos son unos inútiles, vale. Son unos mequetrefes que se creen la hostia cuando no tienen media leche. Vale.
¿En qué quedamos? ¿Vale la pena el sacrificio por frenar a un enano así?
¿O es que no es tan enano?
¿En cual de los dos lados de la moneda nos mienten más?