Juan Marqués se había levantado esa mañana con un terrible resfriado, el dolor de cabeza y la sensación de congestión nasal le impedían estar de buen humor, sabía que su histórico mal humor cada vez que tenía el más mínimo dolor de cabeza no era nada nuevo, así que tampoco le sorprendió que abriera la ventana sin correr las cortinas antes y que éstas se enredaran con la hoja abierta en una posición de semiapertura. Cabreado cerró de un golpe la ventana, corrió malhumorado las cortinas y abrió de par en par las hojas de la ventana. Se quedó un instante pensando por qué éstas no abrían hacia la calle como en muchas ciudades europeas del veinte. Un momento tan breve que ni siquiera pasó a la reflexión. Se puso las zapatillas y se dirigió a la ducha.
Tras el desayuno y otra toma de pastillas para aliviar los síntomas, se vistió y desconectó la holografía del interior de la casa. Las paredes curvadas de neoplástico color naranja le devolvieron a la realidad de su día a día.
Juan pertenecía al club de los “veinteveinte”, un grupo de históricos que querían vivir en el pasado comprendido entre el año 2000 y el 2020 o al menos en apariencia. Los hologramas sólidos recreaban con total ilusión paredes estucadas, muebles, cuadros y todos los objetos y electrodomésticos de aquellos años.
Se dirigió de mala gana a la puerta de salida: “Sinécdoque, doomwad, marjuquesan.” Dijo desbloqueando la cerradura magnética de bloqueo de la puerta. Sabía que fuera le esperaba el transporte personal que le llevaría a su trabajo a 1.000 kilómetros de allí, el tedioso trayecto de quince minutos se le hacía eterno. Disponía de ese tiempo para proyectar las noticias del día.
Juan entró en la cápsula azulada y se acomodó en el asiento, maldiciendo mientras estornudaba sobre lo cómodo que era, no tenía durezas, ni bordes, ni zonas más acolchadas que otras como los sofás que tenía en su proyección de casa. Este asiento era simplemente perfecto y adaptado a cada usuario.
-Noticias color azul –dijo eligiendo el contenido de la información.
“...Conmoción en la red de noticias por la dureza de las penas a la organización Moonpeace tras su acto de reivindicación para la no ingerencia en el ecosistema lunar...”
-Color verde –dijo lacónicamente buscando otro enfoque del mismo hecho.
“...Insuficientes penas de prisión para los activistas de Moonpeace que bloquearon la lanzadera con pancartas proyectadas para impedir el nuevo proyecto de cultivos lunares...”
-Color marrón.
“...En declaraciones a esta red iberoasiática los responsables de la organización Moonpeace afirmaron que continuarían en la lucha pacífica por una luna libre de contaminación humana, añadiendo que estos castigos sólo refuerzan la confianza en sus actos...”
-Color naranja.
“...Los jueces AJ23F y BH76T han presentado su dimisión tras el fallo del tribunal centropeo hacia la organización Moonpeace, desafiando así una penas que consideran totalmente desproporcionadas...”
Juan desconectó las noticias al ver que la cápsula entraba en el túnel del edificio donde trabajaba. Bajó maldiciendo una vez más por el dolor de cabeza que le atormentaba y se dirigió hacia su despacho. De nuevo le habían cambiado la ubicación al 7765Naranja, su despacho, y ahora estaba al final de un ascensor y de recorrer cientos de metros de pasillo usando las ruedas de su calzado. Incómodo, según él.
Saludó con tibieza a su nuevo compañero, 3456Violeta, y se acomodó en su posición de trabajo. Se conectó el casco al cerebro y se alegró por un instante de que la conexión sináptica redujera un poco su dolor de cabeza.
Un nuevo día de procesado de información. Eligió mentalmente varios temas. Nuevo prezoo. Diseños genéticos. Cobro de derechos a cultivos. Con esos tres ya tendría para toda la jornada si no entraba nada nuevo.
-PickNews. Doble Cero Edición. Naranja.
“El nuevo prezoo de Manchuria cuenta desde este mes con nuevos ejemplares de Archaeopteryx a los que se les ha modificado las mandíbulas de dientes afilados, se han añadido tres dedos y quitado las garras, así como diversas características del esqueleto. Para acomodar estos animales prehistóricos al gusto de los visitantes.”
“Nuevos diseños genéticos estarán disponibles en Canadusa, desarrollados por el Consorcio Superadenina Sociedad Global. Ya disponibles ojos con visión infrarroja y ultravioleta para ser incluidos en el catálogo oficial de gestación.”
“Los cultivos que se citan a continuación deben pasar por la oficina de recaudación de derechos de uso antes de finalizar el año. Trigo sin raices, maiz submarino, pak choi sintético, col lunar y aguacates aéreos. De no realizar el pago en las fechas estipuladas, las plantaciones se desactivarán atumáticamente”.
Juan esperó el tiempo reglamentario para ver qué otros colores se interesaban por su edición. Deseando que nadie le prestara la más mínima atención al respecto. Demasiada suerte estaba pidiendo. Salto la alarma marrón en los cultivos, cosa más que previsible.
Color marrón. “Nuevo ultimatum de la oficina de recaudación de derechos a los agricultores de trigo sin raices, maiz submarino, pak choi sintético, col lunar y aguacates aéreos. Un pago que sólo empobrece a los trabajadores del sector, que se ven obligados a incrementar los precios sin que haya una mejora genética del producto.”
Juan sabía perfectamente cómo iba la cosa. Nueva edición y nuevo aporte que anulara las noticias de otro color.
-PickNews. Cero Uno Edición. Naranja.
“Este año se ha retrasado el pago hasta final de año de los cultivos que se citan a continuación: Trigo sin raices, maiz submarino, pak choi sintético, col lunar y aguacates aéreos. La oficina de recaudación de derechos de uso ha escuchado las reclamaciones de los agricultores y está diseñando nuevos cambios genéticos para el próximo año, así como retrasar el pago este año”.
De nuevo la espera. Parecía que esta vez iba a durar más del tiempo esperado. Comenzó a contar los segundos que faltaban, cuando llegó a veinte segundos antes del final estaba tan contento que se le olvidó su resfriado. Cuando los contadores llegaron a cero suspiró aliviado. Desconectó su casco y se limpió la nariz con el nuevo gel antimucosidad. No entendía como ese gel podía tener una viscosidad más asquerosa que sus propios mocos.
Salió de su despacho. Y se dirigió a la cabina de transporte. Estaba deseando llegar a casa y volver a conectar su entorno “veinteveinte”, donde se sentía cómodo.
En el camino de vuelta volvió a repasar mentalmente las fechas de sus vacaciones. Había comprado el paquete completo de “vacaciones de sí mismo”, dudaba si ampliar el circuito neurológico a “suicidio placentero”.
-Quizás el año que viene –pensó mientras suspiraba incómodo-. Con este resfriado sería una tontería.
FIN