Lo sé: hay mucha gente a la que se la pone de granito oír que le han quitado algo a un ricachón. El por qué, es lo de menos. Lo que se va a hacer con los expropiado, también. Lo importante es que al rico se le saquen los higadillos, que se le desplume. Y si hay alguna imagen en la que aparezca llorando por un yate o una mansión, entonces ya hay contracciones húmedas en medio mundo, aunque nos quede la sospecha de que es una idea idiota y contraproducente, como intentaré explicar.
Y eso fue lo que pasó con los oligarcas rusos. Esos que, si fuesen norteamericanos, serían emprendedores, o multimillonarios, o empresarios. Pero como eran rusos, eran oligarcas. Y se pusieron los gobiernos occidentales como locos a la caza de sus activos, de sus áticos y de sus yates, para gran regocijo de los muertos de hambre (físicos y/o morales) del viejo continente, a pesar de la dudosa legalidad de la medida.
Porque la medida es legalmente dudosa, ¿eh? Ya me contaréis qué amparo legal puede tener quitarle los bienes a un particular por su nacionalidad. Ya me diréis si no suena un poco nazi la idea...
Pero lo peor es que no sólo era una idea dudosa, sino que se trataba de una iniciativa francamente estúpida, y creo que vale la pena explicarlo.
En primer lugar, se estaba expropiando a ciudadanos rusos que, en muchas ocasiones, habían salido por patas de Rusia por temor a Putin, que eran opositores al régimen y que no querían verse en la barra del bar sorbiendo un cóctel de Polonio. En otros casos, esos oligarcas habían puesto a buen recaudo sus bienes en Occidente, precisamente por su desconfianza o su enemistad con el régimen. ¿Y cual fue el mensaje que se transmitió? No te opongas a Putin o te atizamos nosotros también. En vez de aprovechar a esa gente para montarle a Putin un movimiento de oposición, se les despluma. Pues genial idea, oye.
En segundo lugar, y consecuencia de lo anterior, fue como gritar por un megáfono: "no saques tu dinero de Rusia. Déjalo allí para financiar a Putin. Si lo sacas, si evades tu capital al extranjero, te dejaremos sin blanca. Quédate en Rusia. Y si puedes reintegrar a Rusia lo que tenías en Occidente, hazlo echando hostias, antes de que en Occidente te lo quiten".
Y luego, claro, nos extrañamos de que el rublo no cayese, primero, y que luego recuperase o aumentase su valor. ¿No os dais cuenta de que lo que era una constante evasión de divisas se cortó de golpe y además muchos oligarcas rusos comenzaron a repatriar el dinero a casa?
Así que cada vez que por aquí se expropiaba un yate, o un ático, o se congelaba la cuenta de un oligarca, no sólo aplaudían los justicieros de la redistribución forzosa. Aplaudía Putin, y con todas sus fuerzas.
¿Cómo pudimos hacer una majadería así?