Me ha sucedido en múltiples ocasiones que, cuando le informo a algún cliente de su derecho a firmar un finiquito poniendo a mano "no conforme" para así no perder el derecho a demandar a su jefe, el cliente me ha dicho que eso debería enseñarse en la ESO o bachillerato. Y tiene razón. El Derecho es una ciencia basada en el sentido común, cuyas nociones básicas puede entender cualquiera, y que resulta tremendamente útil para la vida diaria ¿Por qué, entonces, no se fomenta la cultura jurídica entre los ciudadanos?
Cuando se inventaron las primeras religiones y surgieron los sacerdotes, fue común que éstos se alejasen del pueblo durante uno o varios días manifestando que habían sido llamados por la divinidad para encontrarse con ella en un desierto o en lo alto de una montaña. Luego volvían y proclamaban con aspavientos que, efectivamente, la divinidad se les había aparecido, pero les había hablado de una forma que sólo ellos podían entender y no podían revelar a los demás, por lo que debían cumplir a partir de entonces la función de intérpretes de Dios. Y así comenzaba su chollo.
Esto también sucede actualmente con los lenguajes técnicos de muchas disciplinas, entre ellas el Derecho. Usucapión, pignoración, reconvención, litisconsorcio, litispendencia...son palabras comprensibles si se explican. Pero mucha gente del mundo del Derecho decide usar un lenguaje lo más técnico posible para que la gente de a pie piense que su disciplina es mucho más difícil de lo que realmente es, y así justificar el pago de honorarios astronómicos o mantener en la ignorancia al personal para que no reclame lo suyo por sí mismo.
Esto no significa que los abogados no seamos necesarios. El mundo del Derecho es amplio y hay materias concretas que requieren un estudio detallado para dominarlas y plantear correctamente acciones legales. Pero hay otras cosas (como que tienes 20 días hábiles para demandar a tu jefe por despido, que puedes grabarle y la grabación es legal, que si firmas un finiquito sin poner "no conforme" lo tendrás muy difícil para reclamarle nada o que tienes 1 año para reclamar tu nómina impagada) que todo el mundo podría y debería saber. Porque si no las sabes, aunque luego vayas a un abogado puede que sea demasiado tarde.
Por eso debería haber una asignatura de "Formación jurídica básica" en los institutos, que enseñase a la gente los aspectos del Derecho que más impacto van a tener en su día a día y cómo defenderse frente a los abusos que puedan sufrir como consumidores, trabajadores, víctimas de un delito...la mente de cualquier adolescente podría entenderlo, y habría decenas de miles de trabajos-basura contrarios a la ley menos, porque si le explicas a alguien que en cuanto demanda a su jefe está blindado y no puede despedirle, tendrá más coraje para hacerlo que si se piensa que pueden echarle ipso facto aunque la demanda esté puesta.
Esta cultura jurídica también debería proyectarse sobre la acción de los jueces. Los ciudadanos deberían conocerla y valorarla. El dogma del juez infalible que todo lo hace bien, se desmorona cuando llegas a los juzgados y te encuentras sentencias que, por dejadez del juez, prejuicios ideológicos o cercanía al poder, incumplen los requisitos más elementales de la ley procesal (luego hay otros jueces que sí hacen bien su trabajo, aunque eso no elimina el daño que provocan los anteriores). Pero muchos ciudadanos no lo saben. Ni siquiera saben que los juicios son públicos y cualquier mañana puedes acudir a los juzgados para verlos.
Por ejemplo, el otro día tuve un juicio de impugnación de alta médica. Aporté un informe de traumatología de un hospital público donde, 3 meses después de haberse dado el alta al trabajador, se decía que seguía incapacitado para su trabajo y que requería una baja inmediata para poder restablecerse de sus lesiones. El juez no se dignó a mencionar el informe avalado por un traumatólogo de la Seguridad Social, y sólo citó en la sentencia el informe que le convenía a la mutua. Eso es una cacicada, porque el art. 24.1 de la Constitución impide que se dicte sentencia sin mencionar los argumentos clave en que se basa la postura de una de las partes...y en mi caso, era ése informe que el juez ignoró (por dejadez o porque no le convenía).
Para evitar estas cosas, los jueces deben sentirse observados por los ciudadanos, que deben conocer cuáles son las obligaciones del juez y criticarle públicamente cuando sea claro que no las cumple. Estaría muy bien que en los medios de comunicación hubiese espacios (por ejemplo debates) donde juristas independientes comentasen semanalmente sentencias que pudieran ser criticables por no cumplir los requisitos procesales exigibles o no aplicar bien el Derecho. Porque convertir los juzgados en habitaciones cerradas donde sólo están el juez y las partes, muchas veces acaba derivando en caciquismo. Cualquier autoridad, para hacer bien su trabajo, necesita sentirse observada por aquellos que pagan su sueldo.
Lo dicho, nos hace falta mucha cultura jurídica, aunque a los que mandan no les convenga en absoluto que la tengamos.