-Hola, soy Lucía Etxebarría y quiero daros la bienvenida a este curso de literatura creativa en tiempo real. A ver, tenéis muchos sueños, pero la fama cuesta. Pues aquí es dónde vais a empezar a pagar con sudor...quiero veros sudar y cuanto mejor lo hagáis...
-Oiga, ¿eso no es de Fama? ¿Y por qué está usted en tetas?
-Desnudaros todos. Quiero veros DESNUDOS.
-Yo no quiero desnudarme.
-¡DESNUDOS TODOS O ME CAGO EN DIOS! Así me gusta. A ver, liberados de vuestros convencionalismos, ahora somos todos iguales...disfrutad de la belleza de lo no normativo. Sí, esos cuerpos obesos, cuánta belleza hay en la celulitis, en la grasa, en la curva...quiero que ese chico rubio me envíe una captura de su cuerpo por email. ¿Estamos? Sí, tú...el de los biceps. Además, un punto más para la evaluación final por fotopolla. ¿Ok? Bueno, ahora podemos empezar, hagamos el primer ejercicio de escritura creativa... tenéis 15 minutos para definir la estructura de un relato disruptivo, original, ÚNICO. ¿Lo tenemos? Vamos a leer el mío...
-Pero si no han pasado ni 15 segundos.
-¡Silencio, gordo! Como mi abuela me dijo en su lecho de muerte en aquella mágica Noche de San Juan: nadie es más arrogante, violento, agresivo y desdeñoso contra las mujeres que un hombre inseguro de su propia virilidad.
-¿Su abuela? ¿Pero eso no es de Simone de Beauvoir?
-¡HE DICHO SILENCIO! Y ahora escuchen la CREATIVIDAD EN MOVIMIENTO FLUIR POR MIS SENSUALES LABIOS: "Las rosas son rojas, las violetas azules..."
-¿Está de broma?
-Vaya con la abuelita, que le gusta interrumpir a todo un Premio Planeta, ¿cuál es su nombre?
-Hortensia...
-A ver, Hortensia, ¿quiere compartir con toda la clase la puta mierda de jubilada suburbana que ha pensado para su relato?
-Bueno, influenciada por H. G. Wells he preparado un relato que parte de...
-Influencidi por achi gi wils...venga, váyase a la mierda.
-Pero oiga...
-Que se vaya a la mierda. Apague el ordenador, señora. ¡YA! Su lugar está en la cocina, haga unas croquetas para sus nietos prediabéticos, siga hundiéndose en ese cenagal patriarcal en el que ha logrado flotar toda su vida...
-He pagado por adelantado...
-¡Apague el ordenador, vejestorio! ¡No lo vuelvo a repetir! Sigamos con MI RELATO y aquí nadie habla hasta que yo lo diga.
-Lucia, pero, ¿está usted cagando?
-Dios Santo, ¡sí! ¡Estoy cagando! ¿Nunca ha visto a una mujer cagar? Pero, con esos prejuicios tan banales, ¿qué coño queréis escribir? ¿A qué aspiráis?
-Bueno, pero al menos suba un poco la pantalla, que es que se le ve todo...y además usa usted toallitas, eso es fatal para el medioamb...
-¿NOS PODEMOS CENTRAR EN MI RELATO, HE DICHO?
-Es que se oyen los pedos, Lucía. Es un poco desagradable, ¿puede bajar el audio?
-¡Silencio, calvo! A ver, improvisación, creatividad...ni tan siquiera tengo que escribir, lo recito. DISFRUTAD DEL TALENTO Y APRENDED...
-¿Empieza ya? Queremos leer los nuestros...
-¿¡QUERÉIS CALLAROS!? ¡ESTOY PENSANDO, CREANDO, CONSTRUYENDO UN UNIVERSO AL QUE VOSOTROS, POBRES SACOS DE INMUNDICIA E INDIGENCIA INTELECTUAL, JAMÁS PODRÉIS NI ACERCAROS! Venga, allá va: "Qué es Hemoal y para qué se utiliza. Es un anestésico local por la acción de la benzocaína y un vasoconstrictor..."