Hace una semana pretendía adquirir 2 partidas de Letras del Tesoro, una con vencimiento a 6 meses y otra a 9 meses. Para asegurarme la adquisición pretendía acudir a la subasta del día 7 en la modalidad no competitiva. La petición la hice a través de una cuenta directa abierta en el Tesoro Público. Ya lo había hecho en otra ocasión y no había habido problemas hasta ahora, pero la difusión en los medios especializados y no especializados de prensa, radio y televisión hablando de la rentabilidad que estaban ofreciendo en este tipo de emisiones de deuda ha provocado el colapso del sistema informático. La descomunal demanda de montones de pequeños ahorradores que pretenden no ser vampirizados por las leoninas comisiones que cobran las entidades financieras, si se adquieren estos productos a través de ellos, tiene en parte la culpa. La otra parte es la falta de previsión y arreglar los problemas cuando estos están enquistados, que es lo que se hace en este país.
Para los que no lo sepan, el procedimiento para participar en la subasta es hacer una petición a través de la sede electrónica del Tesoro Público. Una vez aceptada esta, cuya confirmación la hace el propio Banco de España a través de correo electrónico, se debe hacer una transferencia a una cuenta con los datos adecuados. En el campo: beneficiario de la transferencia, se debe de escribir el número de boletín con el que se participará en la puja. Hay una salvedad. El dinero tiene que estar dos días hábiles antes de la subasta.
Como la subasta era el martes día 7, di orden de transferir las cantidades que se pedían el jueves de la semana anterior, es decir, el día 2, tiempo que pensé que sería más que suficiente para que no hubiese problemas. El lunes 6, a mediodía, un día antes de la subasta, el Banco de España me informa que se ha realizado la anulación automática de la operación por haberse pasado el plazo de asignación de la transferencia. Me quedé estupefacto y más sabiendo que un familiar el mismo día, horas después de mí, hizo una transferencia para otra puja en la que el BE le avisó el viernes 3 por la noche, que el dinero transferido había llegado en tiempo y forma.
En otras ocasiones, cuando he transferido el dinero pero se ha anulado la asignación, me han devuelto el dinero en 24 horas. Hoy estamos a 13, han pasado 7 días desde esa anulación, y el BE no me ha dado la más mínima explicación de por qué se anuló mi petición ni cuándo se va a devolver el dinero. En mi entidad bancaria me aseguran que la modalidad de transferencia que usé, necesariamente, tuvo que transferir el dinero en un plazo de como mucho 24 horas. Hasta hace un par de horas no he podido ver mi posición integral en la página del Tesoro. Cada vez que he tratado de acceder, pasado un tiempo en el que aparece un icono de procesando, el mensaje final siempre ha sido el mismo: “se ha producido un error. Inténtelo más tarde”.
Como estaba intuyendo que esta situación se iba a prolongar bastante tiempo, el viernes pasado, día 10, presenté una reclamación en la sede física del BE de mi ciudad. Afortunadamente, no tuve que pedir cita previa, pues sólo iba a poner una reclamación para saber por qué el BE había anulado de manera automática la asignación de la transferencia si, según mi entidad, tenía que haber llegado en tiempo y forma. Otra cosita, si hubiera solicitado un asesor para adquirir Letras del Tesoro u otro producto financiero en la sede física del Banco, la fecha que daban para la cita previa, lo pueden comprobar entrando en la web del Banco, era, al menos para mi ciudad, para dentro de dos meses, como se puede ver en la siguiente imagen:
Cuando llegué al registro me atendió una funcionaria muy amable. Leyó el escrito con la reclamación y comentó que lo que me había ocurrido era muy raro pero que si me acogía a la modalidad de reclamación en lugar de, simplemente, solicitar información la contestación del BE la respuesta podría ser dentro de un mes, por lo que me recomendó un cauce que sólo tarda 10 días en responder, si hay suerte. Además me proporcionó un par de números de teléfono. Eso sí, hasta ahora no me han servido absolutamente para nada.
Me gustaría informar que el servicio de compra en el Tesoro con certificado digital y autofirma ha estado completamente colapsado desde hace días. No es una exageración de la prensa, es completamente real. Lo ha estado tanto que el pasado martes 7, después de celebrarse la subasta del Tesoro Público se puso un mensaje en la web ese mismo día advirtiendo que hasta el viernes 10 a las 12:00 no estaría habilitado el servicio de compra venta de deuda pública. No me lo invento, lo pueden leer en esta captura de pantalla que tuve la precaución de registrar:
El motivo era tratar de solucionar la demanda exponencial que se había producido en las últimas semanas y ofrecer un mejor servicio.
Mi entidad financiera, cuya denominación prefiero censurar por simple cautela, (caso que tenga que litigar con ella), no sabe nada de qué ha podido ocurrir con la transacción y me han emplazado a que me informe desde el BE para tener más datos para así poder reclamar.
¿Cuál es el problema? Que no puedo contactar con ninguna persona del BE que me solucione el problema, al menos por ahora, puesto que la cuenta donde yo he ingresado el dinero está asociada a una cuenta directa que se abrió a través de la sede electrónica del Tesoro Público y, por tanto, no puede corresponder con ninguna de las que tiene asignadas la sede del BE de mi ciudad, que es el sitio donde me pueden atender personalmente. ¿Por qué no puede darme alguna información alguna persona de la sede del BE de mi ciudad? Según la funcionaria que me atendió, por motivos de seguridad. Ellos no están habilitados para consultar cuentas que no correspondan a su sede.
Concluyendo. Es obvio que hay una contradicción entre la información que me proporciona el BE y la que me proporciona mi entidad financiera. O se ha producido un error en el sistema de anulación de asignaciones de transferencia que me impidió acudir a la subasta, o mi entidad me está proporcionando información errónea, cuando afirma que la transacción tuvo que llegar a tiempo.
¿Dónde está mi dinero? Es obvio que está en algún apunte contable del BE pero también es obvio que alguien no ha dado la orden de devolución o que el sistema de supervisión de devoluciones automatizado aún no funciona como debería hacerlo.
¿Qué Banco ha fallado? No tengo ni idea, pero voy a hacer todo lo que pueda para averiguarlo. ¿Cuál es el problema? O, en otras palabras, ¿a quién reclamo si el BE es el supervisor de la mala praxis bancaria y es el propio supervisor el que la está llevando a la práctica?
Es evidente que se han lesionado mis derechos, puesto que no he podido acudir a una subasta en la que cumplía todos los requisitos y se me ha discriminado.
Está claro que, aunque reclame daños y perjuicios, no voy a poder hacer nada litigando contra una administración que me sobrepasa de lejos en recursos legales y tiempo. Sobre todo en recursos porque, por mi parte, estaría dispuesto a echarle el tiempo que hiciera falta.
Es obvio que estoy asumiendo el coste de oportunidad de invertir ese dinero que por ahora está bloqueado en alguna otra inversión u otro producto financiero. Al final, como dicen por aquí, la culpa va a ser del informático de turno.
Las conclusiones que saco son varias:
- El grado de oscurantismo sobre la información a la que tiene acceso todo ciudadano español es un mal endémico que está enrraizado profundamente en cada empresa, cada organización, cada departamento, cada banco y cada institución de este país. La falta de transparencia está profundamente arraigada en la psique de los ciudadanos de este país décadas después de la época represiva de la dictadura. La corrupción de baja y media intensidad durante la democracia lo único que ha hecho ha sido enquistar el problema.
- Ni siquiera te puedes fiar de la supuesta rigurosidad del BE a la hora de estar seguro sobre la información que suministra en sus procedimientos de actuación pues es probable que no se cumpla. Por ejemplo, en otra ocasión en la que adquirí unas Letras del Tesoro pude comprobar que el beneficio que obtuve según el BE no concordaba con el que a mí me salía al procesar los datos en una hoja de cálculo. Dicho de otra manera, había una discrepancia entre el rendimiento real obtenido y el que afirmaba el BE en una clara práctica de información, al menos engañosa.
- Aquí solo se arreglan los problemas sistémicos cuando el sistema está colapsado o a punto de hacerlo. Nuestra capacidad de previsión es bajísima comparada con la manera de funcionar de otros estados. Puede que esta manera de actuar se deba a nuestra miopía en los plazos temporales. Quiero decir con esto que no solemos pensar a medio y largo plazo. La precariedad, la cultura del pelotazo y la falta de recursos ha hecho mucho por seguir en esta línea.
- No existen procedimientos de oficio para compensar de manera automatizada y/o programada los posibles perjuicios que se hayan llevado a cabo, por parte de la Administración, sobre los derechos de un ciudadano. Si quieres ser compensado por los mismos tienes que reivindicarlos invirtiendo tu dinero en abogados y especialistas, tendrás que adjuntar pruebas, tendrás que tener suerte con el juzgado que te toque y el estado de ánimo que ese día tenga su señoría, el juez de turno, y tendrás que tener mucho tiempo disponible y con suerte, tal vez con mucha suerte, y tras largos años de paseos judiciales, a lo mejor se te compensa con algo.
P.D.: Acabo de ver que me han hecho dos retrocesiones de las transferencias.
Los datos de ambas transferencias son:
Fecha: 15/02/2023
Hora: 23:59:30
Fecha de valor: 15/02/2023
Entiendo que las transferencias se hicieron 30 segundos antes de acabar el día 14 y que la fecha en la que el dinero está disponible en mi cuenta es justo al día siguiente.