La lucha contra el cambio climático se enfrenta dos principios básicos de la sociedad tal como está constituida hoy en día, uno filosófico y uno económico.
El económico es que el calentamiento global puede ser en si mismo una gran oportunidad para hacer negocio.
Hoy mismo han dicho que la reconstrucción de una ciudad hawayana, arrasada por las llamas de un incendio condicionado por el brutal calor que hace en casi todas partes, costará mas de 5000 millones de dólares. Esto es crecimiento económico, materiales, transporte, maquinaria, puestos de trabajo.....y ayudas públicas que favorecerán las ganancias privadas.
Si se derriten los hielos de regiones heladas habrá nuevas tierras que explotar, zonas de Canada, USA, Groenlandia, Siberia... y todo un nuevo continente la Antartida.
La industria de las desaladoras puede vivir un auge espectacular.
Habrá nuevas posibilidades de especular con productos agrícolas.
El coche eléctrico va a suponer una renovación inmensa del parque automovilístico, de momento y si este tipo de tecnología no funciona demasiado bien pues de aquí unos años se puede promocionar otro tipo de vehículo a base de hidrogeno o de lo que sea ( yo no tengo idea de mecánica pero he hablado con gente profesional camioneros que hablan muy mal del coche eléctrico y que nunca se comprarían uno).
Habrá grandes proyectos de reparación de desperfectos causados por catástrofes naturales, grandes proyectos urbanísticos de creación de nuevas ciudades ante la inhabitabilidad de otras por la subida de los mares y por otras causas. La producción y venta de sistemas de refrigeración subirá como la espuma.
Nuevos problemas sanitarios, nuevas pandemias que harán "necesarias" nuevas vacunas con el consiguiente negocio millonario.
En definitiva nuevas posibilidades de desarrollo capitalista que se beneficiará de dinero público para engrosar las cuentas corrientes de "emprendedores" privados.
Claro que mucha gente pringará, yo entre ellos pues donde vivo antes en verano algunos días llegábamos a los 35 grados, unos 20 días, mientras que ahora este calor excesivo es casi diario, lo que es malo para unos puede ser bueno para otros, y han salido noticias del número de muerte provocadas por el calor en los últimos años en Europa, varios miles, pero lo que no dicen es la distribución de estas muertes por clases sociales. Es fácil suponer que de ricos bien pocos, pues estos saben bien como protegerse del calor, del frio y de todas las demás desgracias que afligen al ser humano.
El principio filosófico, que refuerza al económico, proviene de la tradición teológica judeo cristiana cuando en la Biblia de lee que Dios dijo: "hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza, que domine sobre los peces del mar, las aves del cielo, los ganados, las fieras campestres y los reptiles de la tierra..." Y claro si el planeta nos pertenece por voluntad divina no estamos obligados a dar explicaciones sobre el uso que hagamos de el, cuando en realidad somos un producto de la naturaleza, uno mas, al mismo nivel que todas las demás criaturas que han surgido de la tierra a lo largo de los tiempos.
Mientras estos dos principios sigan siendo hegemónicos la lucha contra el cambio climático será inútil.