[Los comienzos de la censura en la Italia fascista] "Mientras su posición se viera apoyada por grupos conservadores, Mussolini estaría evitando la formación de frentes de oposición. La prensa en Italia seguía teniendo mucho poder, y Mussolini, muy interesado en el periodismo, controlaba personalmente el fascista IlPopolo d’Italia. Sin embargo, en 1922 el periódico vendía menos copias que los más reconocidos y tradicionales diarios, como el Corriere della Sera, la Stampa o Il Mondo. Seguían en circulación el socialista Avanti! y el comunista L ’ünita. En julio de 1924, Mussolini introdujo la censura de prensa y otorgó el poder a los prefectos para advertir o cesar a editores que diseminaran «noticias falsas», insultasen al «honor nacional» o incitasen a la «desobediencia a las leyes».
El periódico Avanti!, del que Mussolini había sido editor en su juventud, siguió circulando en Roma y otras grandes ciudades, pero fue sometido a una rigurosa censura. Silenciar al personal resultaba más efectivo. El conocido editor Luigi Albertini, del Corriere Della Sera, fue cesado junto con gran parte de su personal. [...] Se estableció que tan sólo los periodistas acreditados podían escribir en medios de prensa, pero se ejerció también la censura a través de la compra de las acciones de algunos propietarios o ejerciendo presión sobre ellos para que cesaran a editores poco favorables al régimen. Aquellos líderes liberales que habían apoyado anteriormente a Mussolini en el Gobierno se unieron a la oposición para protestar contra la censura de prensa."
Página 146, Mussolini y el fascismo italiano, Álvaro Lozano, 2012.