Corte del documental The Red Pill de Cassie Jaye, que expone la investigación de la creadora, inicialmente considerada feminista, acerca del Movimiento por los Derechos de los Hombres en los EEUU (conocidos como MRA por Male Rights Activists). En este corte el activista Paul Elam habla de cómo la imagen de privilegio no es más que una ilusión que oculta la realidad de el hombre es considerado deshechable en la sociedad, con las consecuencias que esto conlleva.

En este artículo, en Areo Magazine, se señala que una mayor igualdad de oportunidades para hombres y mujeres se correlaciona con el ensanchamiento de la mayoría de las diferencias entre los dos sexos.

En este artículo se describen los intereses de los activistas de los derechos de los hombres y como son silenciados o demonizados. Aquí hay otra visión de la CAFE (Canadian Association For Equality) y de los MRA (Activistas por los Derechos de los Hombres, por sus siglas en inglés). Cito:
«CAFE, por ejemplo, se declara "comprometida con el logro de la igualdad para todos los canadienses, independientemente de su sexo, orientación sexual, identidad de género, expresión de género, estado civil, raza, etnia, credo, edad o discapacidad".

[ENG]Una de cada tres mujeres piensa que el feminismo es "demasiado agresivo" hacia los hombres, mientras que un quinto cree que el movimiento es "anticuado" y que ya no es relevante.

Como hablante sueco y conocedor de la sociedad misandrica matriarcal de esa utopía de género llamado Suecia, me tomé la libertad de mirar a través de las leyes suecas y traducir algunos de ellas con el fin de hacer que los lectores tengan una idea de cómo es ser un hombre en Suecia.

La nueva regla 'sin mujer - no hay trabajo' es ahora oficialmente la política de la Universidad de Copenhague, que exije que tanto una mujer como un hombre deben estar entre el grupo de solicitantes. Esto es después de un nuevo plan de acción para equilibrar la distribución de género en la universidad haya sido aprobado por la dirección.

Documental sobre la misandria en nuestra sociedad y en los medios.

A pesar de que los hombres mueren de ello en aproximadamente 1,5 veces la tasa de mortalidad femenina.

[...] La suposición de que los hombres siempre quieren sexo y que las mujeres son inevitablemente más reacias es tan universal en nuestra cultura, que la inequívoca violación de un hombre por parte de una mujere puede servir de chiste en películas populares. Sin embargo, la realidad no es graciosa: Las mujeres asaltan sexualmente a los hombres en los campus universitarios, de forma regular. Cada año, de acuerdo con una estimación en una revisión literaria, más o menos del 19 a 31 por ciento de los estudiantes universitarios varones experimentan algún tipo de contacto sexual no deseado, y los investigadores dicen que la gran mayoría es perpetrado por mujeres.