Es el artículo más absurdo que he leído sobre el tema. Según Bardem, si pudiéramos fabricar un solo tomate y hacer una copia en cada hogar, sin coste de producción ni distribución para cada copia, deberíamos olvidarlo y seguir produciendo los tomates uno a uno, y transportándolos en camiones. ¿Es eso lo que propone? Y lo mismo para la pintura, las copas y los monos de pintor: podemos fabricar uno y disfrutarlo todos sin coste adicional, ¿y nos pide que no usemos esa tecnología?
Es tan ridículo que no puede ser esa su propuesta. Por eso supongo que lo que Bardem propone es que el señor que cultiva los tomates produzca un solo tomate, lo distribuya con su botón mágico y cobre cada copia como si lo hubiera tenido que producir de nuevo. Es decir, en el modelo de Bardem un hombre fabrica un solo tomate y gana cientos de millones de euros. Ah, y los que no tienen dinero para pagar el tomate, pues que se mueran de hambre, aunque darles de comer no suponga ningún coste adicional. Ahora que lo pienso... ¡ese es el sistema tradicional! ¡El que paga las mansiones de Bardem! Ahora ya lo entiendo.
¿No sería más lógico buscar un nuevo sistema en el que el agricultor cobre una cantidad proporcional a su trabajo, habilidad y esfuerzo por crear ese tomate maravilloso (no sé, algo parecido al sueldo de un trabajador normal), y que todos pudiéramos descargarlo? ¿Algo basado en publicidad? ¿Algo basado en impuestos distribuidos en función de barómetros públicos y justos? ¿Por qué los artistas no hacen propuestas razonables? ¿Quizá, porque sus fortunas proceden de un sistema no razonable?
Es tan ridículo que no puede ser esa su propuesta. Por eso supongo que lo que Bardem propone es que el señor que cultiva los tomates produzca un solo tomate, lo distribuya con su botón mágico y cobre cada copia como si lo hubiera tenido que producir de nuevo. Es decir, en el modelo de Bardem un hombre fabrica un solo tomate y gana cientos de millones de euros. Ah, y los que no tienen dinero para pagar el tomate, pues que se mueran de hambre, aunque darles de comer no suponga ningún coste adicional. Ahora que lo pienso... ¡ese es el sistema tradicional! ¡El que paga las mansiones de Bardem! Ahora ya lo entiendo.
¿No sería más lógico buscar un nuevo sistema en el que el agricultor cobre una cantidad proporcional a su trabajo, habilidad y esfuerzo por crear ese tomate maravilloso (no sé, algo parecido al sueldo de un trabajador normal), y que todos pudiéramos descargarlo? ¿Algo basado en publicidad? ¿Algo basado en impuestos distribuidos en función de barómetros públicos y justos? ¿Por qué los artistas no hacen propuestas razonables? ¿Quizá, porque sus fortunas proceden de un sistema no razonable?