Me indigna que se utilice la solidaridad como herramienta para conseguir beneficios económicos. La sinvergüenza de todos los implicados es apabullante, desde el que tiene la idea hasta el propio cliente. Acciones como esta no deberían quedar sin castigo. Espero que la repercusión de esta noticia sea grande y que afecte de alguna manera negativa a Bancaja.
Creo que a todos nos ha pasado que hemos visto anunciado por T.V. o directamente en el kiosko colecciones y fascículos varios que atentan a la inteligencia.
Entiendo que es normal que haya gente de todo tipo en el mundo, hasta ignorantes y tontos que comprarán cualquier cosa, pero me sabe mal que las grandes editoriales se aprovechen de ellos y saquen beneficio económico, aparte de colaborar a la difusión de chorradas, mentiras u objetos inútiles coleccionables.
El autor del artículo tiene una buena propuesta: denunciar este tipo de publicaciones desde nuestros blogs. Ejerzamos nuestra cuota de poder en nuestros blogs o rinconcitos web.
De acuerdo con jonolulu: hay que ignorar a los trolls, pero si somos capaces de hacerles daño sin que nos cause úlcera...pues mejor que mejor! jejeje
Al leer esta noticia me parece oportuno hacer una observación: Este hecho demuestra que incluso de las buenas situaciones pueden derivarse malas consecuencias. Por suerte, lo contrario también ocurre. No existe nada 100% bueno o 100% malo.
Deberían tomarse más medidas y más efectivas para luchar contra el fraude y el engaño que sufrimos los consumidores en la compra de productos de alimentación. Es verdad que "Somos lo que comemos", los efectos de la comida ingerida tiene un impacto decisivo y demasiado importante para la salud como para seguir permitiendo estos abusos por parte de la industria.
Por suerte, algunos privilegiados con acceso a medios de comunicación más libres y difíciles de controlar como Internet tenemos acceso al menos a la información de noticias como estas. Pero debemos ir más allá. Estaría bien que desde las plataformas adecuadas: organizaciones especializadas y partidos políticos, se llevaran a cabo campañas de información por T.V y prensa para llegar a la masa crítica de la población, que también tienen derecho a saber lo que hay que hacer o dejar de hacer (o comprar) para comer sano.
Para empezar, estaría bien eliminar la letra pequeña en todos los productos cuando exponen sus ingredientes y los porcentajes de contenido. Sería muy buena idea que en las escuelas, ya desde pequeños se enseñaran cosas realmente útiles para la vida, como esta por ejemplo: Identificación, propiedades, usos e impacto en la salud de los componentes habituales de todo tipo de aditivos que se añaden a los productos por parte de la industria alimentaria.
Estaría muy bien que se cumpliera en el 100% de los casos la obligación de adjuntar los ingredientes y contenido de cada producto.
Desde el mismo gobierno, debería penalizarse el uso de aditivos que son más perniciosos para la salud que otros que simplemente "cumplen con aprobado justito" pero que por supuesto son más baratos. Del mismo modo debería prever ayudas y fomentar la proliferación de empresas y productos más sanos.
Seguro que ideas como estas hay muchas. El problema es llevarlas a la práctica. La lucha está contra los grandes intereses económicos. ¿Como luchar contra eso? Es una pena que generalmente las personas buenas que podrian hacer realidad ideas como estas no suelen ser lo suficientemente ambiciosas como para llegar alto en la escala de poder y por tanto estar en situación de hacerlo.
#50 edusol 
