Es el colmo del cinismo cuando se trata de disculpar a la página calumniosa (al mentiroso alevoso que ha inventado todo) y aún encima quieren culpar a la víctima. Desde luego, se ve con claridad que son de la oscura cultura de la muerte. Es difícil de creer que pueda haber tanta maldad.
El desmentido era necesario. Lo que se ha hecho es, sencillamente, calumniar. Han hecho una agresión brutal a una persona con nombre y apellidos, atribuyéndole falsamente dichos. Una persona que, a su vez, representa a otros miles de personas. Es grave.