No he leído los cientos de comentarios. Pero creo que se os escapa que pese a la eterna batalla arquitectura-ingeniería, este tema es puramente administrativo y económico.
Los colegios de ingenieros industriales, con el decreto que ordena los visados obligatorios, han perdido la gran mayoría de trabajos que se debían visar, y con ellos la gran mayoría de sus ingresos. ¿Qué queda? El pastel de la edificación (que ya está en las migajas, pero sigue siendo obligatorio visarlo) y ahora pretenden sacar tajada del mismo. Los colegios de arquitectos están que trinan porque saben que si ya han perdido ingresos por que ha bajado la construcción y los visados, si ahora los colegios de ingenieros van a poder visar, pues se acabó lo que se daba...
Se trata simplemente de una cuestión de supervivencia de los colegios de ingenieros industriales y de arquitectos.
Ahora bien, las consecuencias legales, y de responsabilidad social que se derivan de esto son terribles. Los arquitectos no somos artistas, ni somos pseudoingenieros, ni somos solo edificadores. Somos arquitectos y debemos ser los responsables, junto a los arquitectos técnicos, del proyecto y dirección de obras de la arquitectura.
Los datos de "la voz de galicia" no están documentados en ningún sitio. Está basado en afirmaciones del Ministerio de Educación y ciencia.
Y por lo del separatismo, estoy totalmente de acuerdo, deberíamos ir todos juntos, pero el tema es tan desastroso que a cada uno nos afecta de forma muy distinta.
Los colegios de ingenieros industriales, con el decreto que ordena los visados obligatorios, han perdido la gran mayoría de trabajos que se debían visar, y con ellos la gran mayoría de sus ingresos. ¿Qué queda? El pastel de la edificación (que ya está en las migajas, pero sigue siendo obligatorio visarlo) y ahora pretenden sacar tajada del mismo. Los colegios de arquitectos están que trinan porque saben que si ya han perdido ingresos por que ha bajado la construcción y los visados, si ahora los colegios de ingenieros van a poder visar, pues se acabó lo que se daba...
Se trata simplemente de una cuestión de supervivencia de los colegios de ingenieros industriales y de arquitectos.
Ahora bien, las consecuencias legales, y de responsabilidad social que se derivan de esto son terribles. Los arquitectos no somos artistas, ni somos pseudoingenieros, ni somos solo edificadores. Somos arquitectos y debemos ser los responsables, junto a los arquitectos técnicos, del proyecto y dirección de obras de la arquitectura.