El mundo del revés, en vez de juzgar a los padres por arriesgar la vida de sus hijos en barcos de juguete sin más mínimas garantías, juzgan a patrones de barco por no llegar a tiempo a rescatar ilegales.
Y cómo que esos protectores padres no denuncian a la mafia que los llevó? Supongo que las gestiones legales las estará pagando alguna ONG bondadosa y asesorándolos en la dirección correcta.
Me pregunto si a alguien le dan pena las vidas de estos niños y los adultos (aunque poner que son 60 niños da más pena y más rédito).
De momento lo que leo por aquí son discursos de: veis cómo llevábamos la razón, veis como hacen falta ONG, y como la solución no es meterlos en nuestras casas (tampoco lo sabemos por que nadie de todos los que los defendeis ha probado, aunque sea un par de mesesitos).
Te pongo este enlace d un juez de Granada que da una cifra de cuanto cuesta cada Mena (inmigrantes ilegales) a nuestro país. 8600 euros al mes por menor, sea español o ilegal. Lo multiplicas por unos 12000 menas, hacen la bonita cifra de 86.400.00 euros al mes.
#5 aquí tanbien hay padres y madres que no quieren a sus hijos.
En Europa las últimas estudios que leí decían que un 20 % de los niños sufren malostratos y abusos dentro de la familia.
Yo misma lo viví, pero si a día de hoy aún es tabú ya si lo mezclas con inmigrantes, no hay nada que hacer.
En los países musulmanes no conozco ninguna estadística, si es que existen.
Y siempre hay el perdona vidas que no tiene ni puta idea de lo que habla, que viene a pontificar y a enseñarme que tengo que tener más tolerancia y ser menos racista.
Y qué hacen tantos miles de niños viajando solos a Europa? Que no son ni 10 ni 100.
Hace poco salió un artículo en un diario Vasco, era una entrevista a una mujer mora, asesora en temas de su país y co-creadora del calificativo: menores no acompañados, menas. Y lo explicaba muy claro, se ha puesto de moda en Marruecos y son los padres y madres los que envían a los hijos y pagan a las mafias. Y consiguen, por un lado quitárselos de encima y no tenerlos que mantener, y por otro si consiguen llegar y sobreviven, vienen todos detrás por reunificación familiar.
El problema es que mienten tanto unos y otros, informan de lo que les interesa contando medias verdades y de esa forma desfigurado la realidad, que han perdido la credibilidad.
Ahora escucho estudios, noticias, estadísticas... Y no me creo ni la mitad, confío en mi criterio.
Tengo dos familias de Moros de vecinos, veo cómo viven con lo que ganan y pagan, y las cuentas no salen de ninguna manera.
Por decir esto ya me han puesto un strike por incitar al odio. Es lo que tiene decir la verdad, que la gente se mosquea o te censuran.
Es que no me lo puedo creer: que lo haga la iglesia ya estamos acostumbrados, y no deberíamos, pero feministas, mujeres como yo con censura?
Y tampoco estoy a favor de censura en la Universidad, ni en ningún sitio, de homeopatía o cualquier otra alternativa, que al científico de turno no le guste, que de creencias únicas y verdaderas tenemos de todos los gustos y para indignar a los más templados.
Tolerancia con lo que nos da la razón es facilisimo!
Lo mismo hicieron y hacen con las hipotecas, las de los pobres y las de todos. De hecho ya no pertenecen a los bancos y parece, no soy jurista, que no les pertenecen y esto implica, entre otras cosas, que no puedan pedirte judicialmente que pagues ni parte ni la totalidad de ella. Pero seee la teoría a la práctica...
Vivimos con tantas contradicciones todas y todos, que a veces me pregunto cómo conseguimos sobrevivirlas sin volvemos tarumbas.
Siempre he creído que la única revolución que funciona es la personal, porqué escucharnos y seguir nuestras propias verdades sin importar lo que diga el resto del mundo, es lo único que nos trae paz y revoluciona todo nuestro mundo y lo que lo rodea.
Pero es más fácil querer cambiar a los otros y decirles lo que tienen que hacer.
La libertad es la que nos gusta y la que nos disgusta, pero tenemos el derecho a defendernos de quiénes nos la quieren quitar por todos los medios a nuestro alcance.
Estos son mis principios y si no os gustan, no los voy a cambiar...
Yo tengo un Dacia Logan ya hace un año, nuevo me salió a 8000 euros y estoy encantada con él pero en cuanto salga un eléctrico tan asequible, haré el cambio sin dudarlo.
Yo soy mujer, feminista y a favor de la legalización de la prostitución y no me mola el feminismo actual, porqué todo lo extremista me da grima.
Soy de izquierdas de toda la vida, por la economía y las libertades, pero en contra de toda inmigración ilegal, de nuevo grima a todo el extremismo que veo, nada nuevo bajo el sol.
Hay mucha gente que prima el bolsillo a sus libertades, y los gays no son los únicos en la derecha, para un botón las burgesas -las putas pijas las llamo yo-. Y tienen todo su derecho, que para eso es su vida.
Sino me gusta, me jodo por que la libertad es justo eso: joderte aunque no te guste.
Y yo a lo mío, por que soy de izquierdas justo para que ellos puedan vivir con sus incongruencias, como les salga de los huevos y los ovarios.
Según para quien: ni soy feminista ni soy de izquierdas y yo preocupada...
#1 por cierto, hoy te doy la razón o a cualquiera y mañana pues no, y está muy bien que sea así. Los packs/pensamiento único es lo qué, en mi opinión, debería preocuparnos.
#17 Ole tú! Irresponsables que montan a su hijo en una lancha de juguete para la paguita, el piso y la mezquita pagado por nosotros, y reproducirse como conejos de hijos, que no pueden sostener ni ellos ni el planeta, y cuando se ahoga encima la culpa nuestra!!