De lo que estamos hartos muchos ciudadanos es de la gente que se salta las normas: aparcan en los sitios de minusválidos (bueno, quizá sean minusválidos mentales, con todo mi respeto para quienes sí tienen algún tipo de incapacidad real), en los pasos de cebra, ocupan dos plazas de aparcamiento, que meten bocinazos por la noche...
Lo más fuerte es que ves pasar policía municipal y no hacen nada de nada. ¿Para qué queremos una policía que no persigue al infractor? (Ojo, que no todos los policías son iguales; pero hay algunos que descaradamente sólo piensan en que son funcionarios...).
El tema está en las amenazas de muerte y en la libertad de expresión. Hoy en día, tras casi 30 años de democracia, sólo hay un sitio donde se mata por ideas políticas: el país vasco. Y los que matan, alardean de demócratas. Y los que los defienden y justifican presumen de lo mismo.
¿Tanto cuesta escribir correctamente en cada lengua? Porque mucho pedir respeto para unas lenguas y mucho saltarse ese mismo respeto para otras. Siempre me ha parecido de una hipocresía vergonzante.
Si alguien escribe en una lengua y lo hace mal, por mucho que le duela que le señalen los errores... pues lo ha hecho mal. De los errores se aprende (cuando se es buena persona y hay voluntad de hacerlo). Cuando no, se muestra desprecio (lo que indica la categoría del que escribe).
Miliki: una vez más vienes a hacer cierto lo de que si no pienso como tú, estoy equivocado. Si hicieras un análisis sereno de los comentarios verías que quienes amenazan, insultan y agreden están todos en el mismo bando: el de los pro-etarras.
La sin-razón y falta de libertad con que vivimos muchos vascos es fruto del odio y de la falta de respeto por la libertad y los valores democráticos de los radicales y de quienes los apoyan.
Videl, muy típico. Cuanto algo no te gusta, niegas la evidencia. Afortunádamente, no eres tú, sino el padrón municipal el que dice si lo soy o no.
Me da igual lo que creas, no eres precisamente un modelo intelectual ni de valores.
De nada, cesharp. Me da rabia que unos intolerantes puedan erigirse en jueces, ni en la vida ni en un territorio virtual. Actúan como una mafia, intentando controlar los medios de comunicación.
Quizá nos toque vivir como en los tiempos de persecución (personalmente, no creo que tardemos mucho).
Hay más opiniones que las que expresan unos filo-nazis (peguen tiros en la nuca, quemen autobuses o te apedreen en la calle por tener otras ideas políticas diferentes a las suyas).
Afortunadamente, estos desmanes se conocen, están documentados... porque el siguiente paso propagandístico de esta gente será negar que tales hechos se produjeran nunca.
Para los que lo dudan, soy guipuzcoano. En Guipúzcoa está mi familia. Tengo amigos amenazados por la ETA, que tienen que ir con escolta.
Conozco de primera mano la sinrazón de los pro-etarras y de cuantos son de su calaña.
A diario veo la presión que ejercen contra los que no pensamos como ellos: no es razonamiento, es imposición por la ley del más fuerte.
Sin embargo, mantendré mi derecho a llevar el lazo azul cuando haya un secuestro; mantendré mi derecho a expresarme libremente (aunque a los totalitaristas no les guste); mantendré mi derecho a expresarme en la lengua que quiera; mantendré mi derecho a vivir (aunque algunos se crean que puedan decidir quienes tienen derecho a ello y quienes no).
Majetones: no todos los vascos pensamos como los asesinos. Aún hay algunos que tenemos valores.
Si de algo carece el País Vasco es de libertad y democracia. A todo el que no opina como los nacionalistas le hacen la vida imposible o lo matan.
Me niego a aceptarlo como algo normal.
Me niego a que el asesinato, el terrorismo, el tiro en la nuca y cuantos defienden a unos asesinos sean la norma que diga qué es democrático y qué no.
Los que están fuera de la ley no son quienes para imponer nada.
Refleja la cruda realidad. Te mienten en el momento del contrato, incumplen lo apalabrado, te usan... y si reclamas, a la calle. ¿Y los hay que se asombran de que sus empresas tengan una competitividad baja? A mí lo que aún me sorprende es que obtengan beneficios.
La bandera es un símbolo de la nación, del país, del estado. El que ondee significa muchas cosas, entre ellas el respeto del estado de derecho. En la zonas donde no ondea es porque se niega este principio y se conculcan derechos y libertades fundamentales de los ciudadanos (entre los cuales están el uso del idioma: perseguido el empleo del español, marginado su uso en la rotulación pública, policías lingüísticas...). El Gobierno ha hecho dejación de sus funciones constitucionales y la encuesta refleja que la población lo sabe y no lo desea.
Perfecto. Tendrán que incluir medidas sancionadoras (imposibilidad de acceder a contratos públicos, negativas de fondos públicos, sanciones económicas...) para que todo ello surta efecto.
De todas formas, soy escéptico: no creo que funcione.