#5 En un país en el que se apoya a los partidos a muerte hagan lo que hagan, si alguna vez criticamos alguna medida o punto de sus programas, automáticamente quiere decir que hemos fracasado como hooligans políticos. Lo típico.
Siempre me ha sorprendido que, pese a advertirles de la basura que se les echa (desde todas partes, pero especialmente desde España), mis compatriotas griegos sigan manteniendo ese sentimiento de cariño. "Somos mediterráneos, somos hermanos, tenemos que apoyarnos", dicen. Nunca lo entenderé.
Votaron en contra Amanecer Dorado y el PARTIDO COMUNISTA. Ese mismo que critica cualquier paso que dé Syriza por gobernar como si fuera de derechas. Es, cuanto menos, curioso.
"Nada tiene que ver esta ideología con el feminismo que luchó durante siglos por los derechos de las mujeres". Sí, ese que consideraba que las mujeres trans no eran mujeres realmente y que apartaba de su lucha a las que no eran blancas. Mucho mejor, dónde vamos a parar.