El artículo cae un pelín en un planteamiento simplista de "cosas molonas" que se ven en la serie.
Lo verdaderamente grande de Rick & Morty es el descubrimiento de qué hace que Rick c-135 sea más Rick que el resto: Su deseo de sobrevivir aún cuando está claro que todo es inútil.
Rick, según él mismo, puede fabricar una estrella a partir de un agujero negro, es una fuerza imparable del universo que además tiene acceso al resto de realidades. La naturalidad con la que destruye su propio mundo y pasa a otro en el que simplemente entierra su propio cadáver y sigue adelante te deja claro que ya es amigo de la pérdida. Rick QUIERE a su hija y a sus nietos, pero es incapaz de conciliar ese amor con el hecho de que el universo es un lugar cruel que podría acabar con todo. Cuando Summer provoca que acaben conquistando Gazorpazorg, lo hace con una actitud cansada: En el fondo siente lástima de que aquellos desgraciados se metiesen en su camino.
Y lo realmente bestial de la trama es que incluso un simplón como Morty lo llega a entender en un tiempo récord: Su discurso de "Nadie pertenece a ningún sitio, nadie existe a propósito, todos vamos a morir, ven a ver la tele".
Rick es un personaje torturado por el conocimiento de que todo se puede ir a la mierda mañana, posiblemente por su propia culpa y de que incluso un dios como él apenas tiene control sobre ello.
Sin embargo, también es consciente de que lo poco que hace que la vida valga la pena es fruto únicamente de la tozudez con la que toda forma de vida se agarra a su propia existencia, por eso luchará para salir adelante aún con todo en contra y se arrastrará hasta el punto de rezar siendo un ateo declarado, pero será capaz de sacrificarse por su familia.
La estética de la serie no es casual, el aspecto histriónico es precisamente un recordatorio constante de que sin importar la magnitud de los eventos, no hay que tomarse nada demasiado en serio.
La televisión multidimensional no es más que una consecuencia del motivo por el que la serie es un "must see".
Lo verdaderamente grande de Rick & Morty es el descubrimiento de qué hace que Rick c-135 sea más Rick que el resto: Su deseo de sobrevivir aún cuando está claro que todo es inútil.
Rick, según él mismo, puede fabricar una estrella a partir de un agujero negro, es una fuerza imparable del universo que además tiene acceso al resto de realidades. La naturalidad con la que destruye su propio mundo y pasa a otro en el que simplemente entierra su propio cadáver y sigue adelante te deja claro que ya es amigo de la pérdida. Rick QUIERE a su hija y a sus nietos, pero es incapaz de conciliar ese amor con el hecho de que el universo es un lugar cruel que podría acabar con todo. Cuando Summer provoca que acaben conquistando Gazorpazorg, lo hace con una actitud cansada: En el fondo siente lástima de que aquellos desgraciados se metiesen en su camino.
Y lo realmente bestial de la trama es que incluso un simplón como Morty lo llega a entender en un tiempo récord: Su discurso de "Nadie pertenece a ningún sitio, nadie existe a propósito, todos vamos a morir, ven a ver la tele".
Rick es un personaje torturado por el conocimiento de que todo se puede ir a la mierda mañana, posiblemente por su propia culpa y de que incluso un dios como él apenas tiene control sobre ello.
Sin embargo, también es consciente de que lo poco que hace que la vida valga la pena es fruto únicamente de la tozudez con la que toda forma de vida se agarra a su propia existencia, por eso luchará para salir adelante aún con todo en contra y se arrastrará hasta el punto de rezar siendo un ateo declarado, pero será capaz de sacrificarse por su familia.
La estética de la serie no es casual, el aspecto histriónico es precisamente un recordatorio constante de que sin importar la magnitud de los eventos, no hay que tomarse nada demasiado en serio.
La televisión multidimensional no es más que una consecuencia del motivo por el que la serie es un "must see".