Uno de los últimos casos resueltos por el servicio técnico jurídico de la Consellería de Medio Ambiente hace referencia a hechos acontecidos en julio de 2004 en la localidad de Aguiño, en el concello de Ribeira, donde gracias a la denuncia de un ciudadano se pudo detectar un caso de maltrato continuo a dos canes -macho y hembra- de raza pastor alemán.
El propietario le propinaba golpes en distintas partes del cuerpo con tubos semirígidos de plástico, actitud que justificó como "una intención de asustarlos para que no le comiesen las gallinas", según informa Medio Ambiente. El agente de la Delegación Provincial de la Consellería, acompañado por efectivos del Seprona, procedió a la incautación de los dos perros después de la denuncia, con el fin de garantizar su bienestar hasta la resolución del expediente abierto.
Consecuencias mortales
De hecho, a consecuencia de los golpes recibidos, el macho falleció a finales del mes de agosto en el Hospital Rof Codina en Lugo, a donde había sido trasladado para realizarle un examen exhaustivo de su dolencia. Los análisis psicológicos que le fueron realizados a los dos perros reflejaron claros síntomas de haber sido maltratados de forma reiterada. Los animales presentaban actitudes de terror cuando recibían una caricia o cuando alguien se acercaba a ellos de forma algo brusca.
Finalmente, al propietario le fue impuesta una multa de 6.000 euros por los maltratos de los dos animales, y la hembra permanece en la actualidad ingresada en el centro de la Asociación Protectora de Animales y Plantas de Santiago de Compostela. Desde Medio Ambiente aseguran que evoluciona favorablemente, al tiempo que recuerdan que "está a disposición de calquera persoa que queira adoptala definitivamente e ofrecerlle un fogar".
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Uno de los últimos casos resueltos por el servicio técnico jurídico de la Consellería de Medio Ambiente hace referencia a hechos acontecidos en julio de 2004 en la localidad de Aguiño, en el concello de Ribeira, donde gracias a la denuncia de un ciudadano se pudo detectar un caso de maltrato continuo a dos canes -macho y hembra- de raza pastor alemán.
El propietario le propinaba golpes en distintas partes del cuerpo con tubos semirígidos de plástico, actitud que justificó como "una intención de asustarlos para que no le comiesen las gallinas", según informa Medio Ambiente. El agente de la Delegación Provincial de la Consellería, acompañado por efectivos del Seprona, procedió a la incautación de los dos perros después de la denuncia, con el fin de garantizar su bienestar hasta la resolución del expediente abierto.
Consecuencias mortales
De hecho, a consecuencia de los golpes recibidos, el macho falleció a finales del mes de agosto en el Hospital Rof Codina en Lugo, a donde había sido trasladado para realizarle un examen exhaustivo de su dolencia. Los análisis psicológicos que le fueron realizados a los dos perros reflejaron claros síntomas de haber sido maltratados de forma reiterada. Los animales presentaban actitudes de terror cuando recibían una caricia o cuando alguien se acercaba a ellos de forma algo brusca.
Finalmente, al propietario le fue impuesta una multa de 6.000 euros por los maltratos de los dos animales, y la hembra permanece en la actualidad ingresada en el centro de la Asociación Protectora de Animales y Plantas de Santiago de Compostela. Desde Medio Ambiente aseguran que evoluciona favorablemente, al tiempo que recuerdan que "está a disposición de calquera persoa que queira adoptala definitivamente e ofrecerlle un fogar".
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Por cierto el HP este sigue maltratando perros.