#2 yo trabajé unos cuantos años con franceses y la opinión mayoritaria era que había que mandar a la mierda a los dom tom, empezando por Córcega (aunque no lo sea) ,
#2 Yo flipo con la variedad que tienen ahora los Playmobil, molan muchísimo más que en mi época. Sin embargo, por lo que veo en mi entorno incluidos mis hijos, las pantallas hacen que jueguen mucho menos de lo que hacía yo a su edad. Entre jugar y pantalla siempre escogen pantalla. Una pena.
Mítico anuncio futurista de la marca en los 80, que a mi me descubrió a Jean Michel Jarre y su monumental Second Rendez Vous. Mi hermana y yo no paramos hasta descubrir quién era el autor de esa música.
Joder, los Celtas, primeros noventa, flipando muchísimo con las instrumentales de rock celta, El tunel de las delicias, Hacha de guerra, El Alquimista loco... vaya temazos, qué tiempos de adolescencia.
20 de abril es la famosa, pero la Senda del Tiempo es otra canción enorme también.
#7 Mi padre era del sur de Ávila y la verdad es que la gente en estas fotos me recuerda un montón a mis propios abuelos, lo curtido de la piel, el trabajo en el campo, la ropa, la expresión en la cara, la pobreza... grandísimas fotos.
#17 Yo la he empezado como tres o cuatro veces, pero me parece aburridísima. Ahora bien, sabiendo que hay una escena de sexo lésbico increíble igual le doy otra oportunidad...
#8 Estaría políticamente muerta si sus votantes le diesen la espalda, pero estoy bastante seguro de que hoy tendría mayoría absoluta con más holgura si cabe.
Como nativo de Valladolid os digo a todos que me comais el rabo.
No, en serio, buen ejemplo de lo que habla en el vídeo es cómo canta J de los Planetas y cómo habla, y cómo ha evolucionado su acento cantando con los años, de ocultarlo por completo a hacerlo super evidente en los últimos discos.
#9 ya te digo, trabajo a menudo con muchas nacionalidades y a los que peor entiendo con diferencia es a los British. Eso sí, el acento es súper bonito.
Lo peor es que lo que muestra era tal cual en la realidad. Mi padre era de un pueblo perdido en las tierras del cacique y siendo de familia muy pobre él fue el único que salió a estudiar a base de becas, aparte del hijo del señorito. El señorito no dejó de presionar a mi abuelo para que le hiciera dejarlo, diciendo cosas como las de la película: "Pon a trabajar a este vago, que deje los libros y se ponga a doblar el lomo". Menos mal que mi abuelo tenía las cosas claras y le mandó a la mierda.
Por cierto, el hijo del señorito ha llegado a ser diputado por el partido popular varias veces.