La falta de imparcialidad es un problema sistémico y específicamente español. Y aunque responde a causas muy diversas, hay un momento decisivo en esta deriva es el de la respuesta al movimiento independentista catalán. El Gobierno conservador decidió convertir en judicial un problema que era esencialmente político e invitó a los jueces a situarse en la primera línea de defensa no ya de la ley, sino de la nación.....
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Eso de que de cerrarle las puertas traseras con las que la justicia actualmente se puede mear y se cagar en el estado de derecho, como que os pone al borde de un ictus.
Y sin embargo, a la izquierda o no la imputan, o la absuelven una vez tras otra.
Me gustaría saber en qué te basas.
Lo evidente es que no se debe permitir que sean los jueces quienes escojan a los nuevos jueces pues eso crea una casta de vigilantes amparados por la impunidad.
Pero ahora mismo no se presta ninguna atención a la capacidad para realizar ese trabajo. Solamente se mira que hayan memorizado leyes, cuando es la parte menos importante.
Son una serie de habilidades necesarias. Entre ellas la capacidad de razonar y la capacidad de actuar independientemente de las propias creencias.
Pero no cabe esperar milagros. Debe haber un mecnismo de control en caso de desmanes. La impunidad no es tolerable, y por lo dicho antes, el control de los jueces no pueden ejercerlo los propios jueces.