El dominó ha arrancado y parece imparable. Grecia arrastra a España. Europa mira a Madrid, la otra gran preocupación mundial, y España mira a Europa pidiendo ayuda. Mariano Rajoy surca una ola de miedo, a ratos histeria. Pero hace todo lo posible para que no se note. Y en eso, en aparentar normalidad, es un auténtico especialista. Aunque a su alrededor, todo son noticias pésimas.Después de 48 horas desaparecido para el gran público, Rajoy llegó al Congreso a las nueve de la mañana con un desayuno difícil de digerir: la prima de riesgo
|
etiquetas: rajoy , ayuda , europa