Según afirma la prensa, en el desalojo de la acampada de Barcelona no hubo incidentes. Debo pensar entonces que los golpes que recibieron Alejo Cuervo y Natalia Cervera son producto de su imaginación. Pero no; fue lo que ocurre cuando dos ciudadanos piden la identificación a un policía en ausencia de periodistas y de cámaras. Respuesta del policía: «la llevo en el culo». Sólo hay una clase de personas que creen que estas cosas no pasan: los que nunca protestan, el resto sabemos lo que hay. Esto no es nuevo, no es de hoy. Esto es el mundo real.
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