Esta vez, quien se levanta en Canterbury no es un consumado ‘antipapa’ protestante, sino un potencial ‘Papa luterano’. Junto con las ilustraciones de grabados renacentistas mostrando espantosas torturas en el socorrido recurso de la Leyenda Negra española revivida en la ‘Spanish Inquisition’, el vértigo de la historia sorprende cuando en las iglesias británicas vuelve a gritarse “¡Herejía, herejía!” y “¡Arrepiéntete, arrepiéntete!”.
|
etiquetas: iglesia , protestante