Según estudios elaborados por El Centro de Servicios y Promoción Forestal y de su Industria de Castilla y León (Cesefor) el uso de madera en la construcción consigue un ahorro de 60 toneladas de emisiones de CO2. De esta manera si en la construcción de una casa de 100 metros cuadrados se utiliza la madera en la estructura, ventanas, puertas y suelos, en vez de otros materiales, se logra una absorción de 20 toneladas de CO2. Con su uso, además, se podría reducir el gasto energético al ser más aislante la madera y más cálida.
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