El panorama bancario español está en plena transformación. Mientras los grandes bancos tradicionales viven una segunda oleada de fusiones en España, brotan los nombres de nuevas marcas digitales. Los neobancos operan bajo una premisa sencilla: poder abrir una cuenta en pocos minutos, cobrar pocas o ninguna comisión y ser, sobre todo, digitales. En este contexto financiero, ha desembarcado Nickel en España. El neobanco es propiedad del gigante bancario francés BNP Paribas, segundo banco por activos de Europa tras el británico HSBC.