Los padres de alumnos de una escuela infantil pública de Parla denuncian las "temperaturas excesivas" que ponen "en riesgo la salud de los niños". La dirección del centro lleva un año quejándose a la Comunidad por el elevado calor: "Se han registrado 32 grados en las aulas y 35 grados en los pasillos". La Consejería de Educación descarta poner aire acondicionado.