“En la historia de la energía, hemos sido testigos de la era del carbón y la era del petróleo, y ahora nos estamos moviendo a gran velocidad hacia la era de la electricidad, que definirá el sistema energético mundial en el futuro y se basará cada vez más en fuentes limpias”, ha sostenido Fatih Birol, director de la AIE, a través de un comunicado. Este cambio de “era” tendrá consecuencias, lógicamente, en las emisiones de dióxido de carbono (CO₂), el principal gas de efecto invernadero, que expulsa el sector energético internacional.