De exhibir en las paredes grabados originales de Chillida, a lucir fotografías del estadio Metropolitano -el antiguo, no el de ahora- junto una caricatura de Luis Aragonés. De tener la carta de vinos diseñada por Alberto Corazón con doble mantel de lino a los desechables de papel. De dar de comer garbanzos con chipirones al Rey emérito o a Gabriel García Márquez a reunir a los obreros, jardineros y barrenderos del exclusivo barrio de Salamanca al ofrecer un menú del día a un precio imbatible.
|
etiquetas: gastronomía , madrid , barrio de salamanca , cafetería villalar