La Defensora del Pueblo gallego, Milagros Otero se dirigió el pasado jueves por carta al presidente del Parlamento para formalizar su voluntad de "renunciar" al cargo (después de que el Tribunal Supremo rechazase su recurso contra la sentencia en la que el TSXG anulaba por "desvío de poder" el nombramiento de María Puy, sobrina de Manuel Fraga, como jefa de servicio); sin embargo solamente un día después modificó esa carta, para poder seguir en el puesto incluso después de octubre de 2020, cuando acaba su mandato. [GLG]