La pandemia ha traído también a nuestras vidas una nueva forma de semiesclavitud: la de las cuidadoras de ancianos que son forzadas a trabajar siete días a la semana sin poder salir del domicilio a cambio de salarios miserables, de entre 400 y 600 euros de media al mes. Este abuso, que roza lo inhumano, no es un viento lejano de países en desarrollo. Lo practican cientos de españoles, posiblemente miles, en ciudades grandes y en pueblos pequeños.

"Encerrados, drogados y alimentados mediantes sondas intragrástricas". La Guardia Civil ha detenido a un matrimonio que mantenía a ancianos encerrados en condiciones insalubres en una "casa de los horrores" mientras se apropiaban de sus bienes. Además de la pareja han sido detenidos otras cuatro personas y se investigan a otra cuatro más, dentro de un entramado que se habría apropiado en poco tiempo de más de 1.800.000 euros.

Los Mossos d'Esquadra detuvieron este pasado viernes a las 20.00 horas a un adolescente de 16 años denunciado por agredir y abusar sexualmente a seis mujeres de alrededor de 80 años en Olot (Girona). Las denunciantes han explicado al cuerpo policial que han sido víctimas de tocamientos y que el joven aprovechaba lugares apartados para masturbarse enfrente de ellas.

La Policía arresta al novio de una amiga de su madre por manosearla en una mesa de picnic en una fiesta por la independencia de Nicaraga

El comunicado añade que estos agentes investigaron a los estudiantes durante seis meses "sin informar al juez ni someterse a supervisión de la justicia"

Japón lleva tiempo lidiando con "muertes solitarias": personas sin red de apoyo fallecen y no son descubiertas por mucho tiempo. El gobierno revela 28.330 casos en los primeros 6 meses de 2024. Según la Policía, las autoridades tardaron 2 semanas o más en reconocer la muerte en 4.913 casos, el 17,3%. Más datos: en el 9,8% tardaron de 2 a 3 días, 12,5% de 4 a 7, ,8% de 8 a 14 y 19,3%, al menos 15; y en el 2,7% al menos 91 días. En algún caso se descubrió al agotarse la cuenta bancaria del anciano de la que se descontaba el pago del alquiler.

Tenía tres días para abandonar el asilo a menos que realizara un pago de US$110.000. Se sorprendió debido a que firmó un contrato vitalicio para poder vivir en el hogar de ancianos. En su momento, realizó un pago de US$250.000 y, además, pagó un alquiler mensual de US$5.000. No obstante sus ahorros se agotaron, y la compañía que gestionaba el hogar se declaró en quiebra y vendió sus instalaciones a otra. Esta ahora le está exigiendo el pago si quiere permanecer en el lugar, a pesar de afirmar que respetarían los contratos anteriores.

La Fiscalía acusa a los dos hombres procesados de un delito continuado de abuso sexual contra un niño

Agentes de la Guardia Civil han detenido en Álora a un hombre de 58 años por las presuntas agresiones sexuales a dos menores de corta edad, quienes serían nietas de su pareja. Al parecer, fue la madre de las pequeñas quien denunció al investigado tras tener conocimiento de estos hechos por parte de una de sus hijas.

De esa cifra, casi 4.000 personas fueron descubiertas más de un mes después de su muerte, y 130 cadáveres pasaron inadvertidos durante más de un año antes de ser encontrados. Se espera que el número de personas mayores (de 65 años o más) que viven solas alcance los 10,8 millones en 2050, el 20% de los hogares. El gobierno japonés presentó un proyecto de ley para abordar el problema de la soledad y el aislamiento que ha azotado al país durante décadas, en parte causado por el envejecimiento de su población.

En la Comunidad de Madrid, el exceso de mortalidad durante la primera ola de la pandemia (primavera de 2020) fue el mayor de las 17 comunidades autónomas. Y en Madrid la mortalidad dentro de las residencias fue con diferencia la mayor de todas. Según los datos oficiales, esa primavera murió una de cada cinco personas que vivía en una residencia.

La turistificación y la explotación de la ciudad de Madrid es una realidad problemática que siguen apuntalando los grandes propietarios. Es el caso de Fernando Ramírez de Haro, marido de la expresidenta madrileña Esperanza Aguirre, que ha abierto un hostel turístico en la céntrica calle Pez en lo que antes era una residencia de ancianos benéfica. El empresario es hermano mayor de la Hermandad El Refugio, entidad dueña del espacio, cuya transformación ha contado con el beneplácito y la autorización del alcalde de la capital.

La Xunta de Galicia sancionó con 38.000 € a la Residencia Nuestra Señora de Fátima por, entre otras cosas, insuficiente comida y sujeción ilegal de un anciano. El alma máter del asilo tuvo relación con un "bar de señoritas" hace décadas en O Barco, según dijo al juez Carlos Moner, el ex-administrador judicial impuesto en su día a la Fundación, cuando su creador fue arrestado por malversación y fraude. Esta redacción contactó con la Consellería para que explicase por qué sigue pagando con dinero público plazas en un centro con tales antecedentes

Una enfermera de la residencia gaditana Cruz Roja San Fernando organizaba carreras de sillas de ruedas en plena pandemia del coronavirus. Concretamente, en abril de 2020. Además, las subía a sus cuentas personales de TikTok y de Instagram. La profesional sanitaria perdió su trabajo y el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ha ratificado el despido disciplinario. En su carta de despido, la empresa le trasladó que esta actitud era absolutamente improcedente y destacó el daño a la imagen de la residencia.

El secretario general del sindicato Pepe Álvarez se ha reunido con delegados del sindicato y con la dirección de la empresa a la que ha pedido abrir una mesa de negociación

Un cuidador ha sido detenido en la ciudad italiana de Caserta (sur) después de haber confesado ante la policía el supuesto asesinato en los últimos años de cuatro ancianos a los que cuidaba con una mezcla de fármacos letal.

Es uno de esos casos en los que te tienes que frotar los ojos para intentar creerte lo que estás viendo: un matrimonio en el que la esposa, médico, tenía una fuerte alergia alimentaria a los frutos secos y a los derivados lácteos, se sentó a comer en un restaurante en Disney World. Tras informar de sus alergias al personal siguiendo su habitual rutina y que le «garantizasen inequívocamente» que la comida no contenía alérgenos, se la comió, empezó a encontrarse mal (...)