Mientras Megan Rapinoe, capitana de la selección estadounidense de fútbol, se niega a pisar «la jodida Casa Blanca» por estar ocupada por un misógino, racista y xenófobo, los asesores del presidente, en un intento de lavarle la cara, le llevaron un grupo de personas pertenecientes a minorías religiosas perseguidas. Pues bueno, el tiro les salió por la culata y la prensa mundial tachó el encuentro de «bochornoso»...

Los llamamientos a acelerar las evacuaciones y a cerrar los centros de detención se repitieron tras el ataque, pero han servido de poco: decenas de personas vuelven a encontrarse, menos de un mes después, recluidas entre sus paredes. Los riesgos a los que están expuestas, insisten desde MSF, siguen siendo los mismos. "A pesar del reconocimiento por parte de las autoridades libias y la comunidad internacional de que el centro de Tajura no es seguro, está lleno de migrantes".

La historia se repite porque el problema en el Mediterráneo sigue sin resolverse. Después del caso de la nave Sea Watch 3, capitaneada por la joven comandante Carola Rackete, el barco Alex de la ONG italiana Mediterranea llegó el sábado al puerto de Lampedusa con 41 inmigrantes. La embarcación ha desobedecido de nuevo la prohibición del ministro del Interior, Matteo Salvini de atracar en uno de los muelles del país.

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, culpa a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) liderada por EE.UU. de la destrucción de Libia. “Sería bueno recordar cómo comenzó todo. ¿Quién destruyó el Estado de Libia? Me imagino [que] fue una decisión de la OTAN, los aviones europeos bombardearon Libia. Los resultados son claros: el Estado de Libia está destruido”, afirmó el jueves el mandatario ruso al ser preguntado acerca de las próximas acciones de Moscú en el territorio en cuestión.

Se espera que los misiles antitanque Javelin de fabricación estadounidense y supuestamente pertenecientes a las "Fuerzas Armadas de los Emiratos Árabes Unidos", incautados en Libia la semana pasada, empeoren las ya ásperas ventas militares entre Abu Dhabi y Washington.

Los combates en Trípoli dejan al menos 44 personas y 130 heridos en el centro de detención de migrantes de Tajura, a 15 km de Trípoli. La autoridad de la capital achaca el bombardeo a las tropas del Ejército Nacional Libio-LNA. Khalifa Haftar podría ser un criminal de guerra, según Ghassan Salamé, enviado especial de la ONU. El ataque al centro de detención “podría constituir claramente un crimen de guerra , ya que ha matado por sorpresa a personas inocentes cuyas condiciones extremas les obligaron a estar en ese refugio"

Al menos 40 migrantes murieron y más de 80 resultaron heridas en un supuesto bombardeo de las tropas bajo el mando del mariscal Jalifa Hafter que afectó a un centro de detención en la localidad de Tajura, en el sur de Trípoli, informó una fuente médica del gobierno sostenido por la ONU en la capital. Según la fuente, el ataque fue perpetrado al caer la noche por cazabombarderos F-16.

El Gobierno de Acuerdo Nacional libio (GNA) afirma haber visto soldados franceses al servicio de las fuerzas del general Khalifa Haftar. El comandante de la Primera Brigada de Infantería del GNA, Mustapha Al-Machai, afirmó haber visto seis coches con soldados franceses estacionados en la sala de operaciones de Haftar en la ciudad de Gharyan, al sur de Trípoli, la capital de Libia

Un ataque aéreo contra un centro de detención para inmigrantes irregulares en un suburbio de Trípoli ha causado la muerte de 40 personas, mientras que al menos 80 han resultado heridas. Los responsables del ataque son las fuerzas del Ejército Nacional de Libia (LNA, por sus siglas en inglés), leales al mariscal de campo Khalifa Haftar.

Jalifa Haftar acusa a Turquía de injerencia al apoyar a las milicias rivales y amenaza a los barcos y aeronaves turcas que atraviesen las aguas territoriales y su espacio aéreo.

Turquía, uno de los únicos aliados de Qatar en la región, enfrenta el mismo riesgo al estar los aliados del eje Ankara-Doha bajo el ataque de saudíes y emiratíes. Aliado de Sudán desde hace mucho tiempo, Qatar observa en silencio la crisis en Jartum, donde los militares expulsaron al presidente Omar al Bashir del poder el 11 de abril y participan ahora en tensas negociaciones

El "Ejército Nacional Libio" ha derribado un avión Mirage F1 en Trípoli y capturado a su piloto, quien ha resultado ser de nacionalidad portuguesa. El ENL, encabezado por el mariscal Jalifa Haftar, asegura que el rehén es un "mercenario". Las fuerzas lideradas por Haftar iniciaron el pasado 4 de abril una ofensiva para recuperar el control de la capital y "liberarla" de "milicias y terroristas". Según la Organización Mundial de la Salud, ya son al menos 392 las personas que han muerto, además de otras 1.936 personas heridas.

Por la mañana los soldados entraron en el centro de detención de inmigrantes de Tajora, y se llevaron a Alec. Lo vistieron con uniforme militar y lo obligaron a acompañarlos. Hacinado con otros cientos, Alec es solo uno de los migrantes y refugiados alimentados con solo una comida al día y obligados a combatir en la guerra civil de Libia. [ing]

El fiscal ha emitido este jueves la orden de detención contra Haftar y seis de sus oficiales, acusados de ataques aéreos contra instalaciones y barrios civiles. La orden de arresto es la respuesta al mandato emitido el día 11 por el ENL, encabezado por Haftar, contra el jefe del GAN, Fayez al-Sarraj, y otros responsables de su gobierno. Desde el derrocamiento de Gadafi en 2011 en una intervención militar de la OTAN, surgieron dos facciones principales: una, liderada por Haftar, con sede en Tobruk, y la otra, el GAN, con sede en Tripoli.

Según el canal de televisión CNN, los buques de guerra turcos se han desplegado en Trípoli y Misrata. La fuente agrega que los buques de guerra turcos llegaron a Libia tras cruzar el Mar de Mármara, en el norte del país, y están situados en un área de 78 millas náuticas de la costa de Libia. Fuentes en Turquía dicen que los barcos con destino a Libia son parte de una misión para combatir a los “traficantes”.

La situación de los migrantes en Trípoli era inhumana… y entonces la guerra se trasladó a menos de 20 kilómetros de la capital de Libia. Al menos 1.300 refugiados y migrantes se encuentran en los centros de detención más cercanos a Trípoli. Las ONG denuncian su vulnerabilidad y se muestran muy preocupadas ante las informaciones que alertan de que podrían estar siendo usados como combatientes en la batalla.

Un avión de combate del Ejército Nacional Libio (LNA), la fuerza armada controlada por el general Jalifa Haftar, ha resultado derribado este domingo por el Ejército regular de Libia cuando bombardeaba el sur de Trípoli, según han confirmado fuentes militares. Los dos pilotos del aparato consiguieron saltar en paracaídas y ahora están siendo perseguidos por las fuerzas del Gobierno de Trípoli, reconocido por la comunidad internacional, informa 'The Libya Observer'

Según informó el viernes el diario estadounidense The Wall Street Journal (WSJ), días antes de que el Ejército Nacional Libio (ENL), encabezado por el general Haftar, lanzara una ofensiva militar contra Trípoli, Arabia Saudí ofreció decenas de millones de dólares para respaldar la citada operación. La oferta se realizó durante una visita de Haftar a Riad, la capital saudí, donde se reunió personalmente con el príncipe heredero de la monarquía árabe, Muhamad bin Salman, así como el jefe de inteligencia y ministro del Interior del régimen saudí,

Alrededor de 1.600 personas se vieron desplazadas durante la jornada del martes a causa de los combates en los alrededores de la capital de Libia, Trípoli, lo que eleva a 4.500 el número de personas que han tenido que abandonar sus hogares a causa de los enfrentamientos, según la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios. Cerca de 50.000 niños que viven en Trípoli están "bajo amenaza inmediata" y que decenas de miles más podrían verse afectados a causa de los combates.

o que comenzó en 2011 con protestas antigubernamentales como parte de la llamada "primavera árabe" terminó con la intervención de la OTAN y el sangriento derrocamiento de Muamar Gadafi, el excéntrico líder que gobernó el país por más de 40 años. Criticado por violaciones y abusos de los derechos humanos, Gadafi también convirtió a la rica nación petrolera en uno de los países con más altos estándares de vida en África, con atención médica y educación gratuitas.

El coste del barril de petróleo Brent, de referencia en Europa, se ha situado este lunes por encima de los 70 dólares, lo que supone un récord en lo que va de año y su cota más elevada desde el pasado mes de noviembre. La tensión geopolítica que viven dos de los países principales productores de esta materia prima –Venezuela, desde hace varias semanas, y ahora Libia– están condicionando la revalorización del crudo en los últimos días.

El Gobierno de Trump insta a que las fuerzas del comandante libio Jalifa Haftar detengan de inmediato la ofensiva contra Trípoli, que está bajo control del órgano transitorio apoyado por la ONU.

El mariscal Jalifa Hafter, hombre fuerte de Libia, ha intensificado su ofensiva militar sobre Trípoli con bombardeos en los barrios del sur, que habrían causado un número indeterminado de víctimas, y amenaza con provocar un baño de sangre en la capital. Ha desoído la llamada de Naciones Unidas que pedía un alto el fuego para evacuar a los heridos El Ejercito Nacional Libio advierte de que sus baterías derribarán cualquier avión que sobrevuele áreas bajo su control.