Las diecisiete personas que se encerraron la noche del viernes en la Catedral de Granada para protestar por la inminente entrada en prisión de Carlos y Carmen, condenados a tres años de cárcel por participar en un piquete informativo durante la huelga general del 29 de marzo de 2012, han abandonado este mediodía (sábado) el templo entre aplausos y gritos de apoyo a los dos activistas del 15M.