Supongamos un trabajador desempleado al que un empresaurio le ofreciera un empleo y su consiguiente contrato de trabajo; pero un empleo típico de Manolo el del bar, es decir con jornada inferior a la real, clasificación profesional inferior a la real, salario inferior al correcto, convenio "equivocado", etc. etc. En esos casos a veces sucede que el trabajador no acepta el nuevo empleo "porque el contrato está mal". Lo cual puede ser perfectamente absurdo en muchos casos y no por aquello de que "peor se está en el paro".
|
etiquetas: contrato , trabajo , firma