La Residencia Ballesol Alcalá tenía 192 residentes en abril de 2020, uno de los meses más duros de la crisis sanitaria del covid-19. De ellos, fallecieron 89, casi la mitad. En concreto, el 46%. En Sanitas La Moraleja vivían por su parte 81 ancianos, pero en las mismas fechas fallecieron 31. En este caso, el 38%. En Nuestra Señora de la Soledad y del Carmen, en Colmenar Viejo, murieron 30 residentes de los 51 que había en lo peor de la pandemia. Fueron el 58,8%.