La economía española crecerá el 2,9% este año (contra el 1,4% de la zona euro) y el 2,8% el que viene (2,1% eurozona), apoyada por las condiciones de financiación del BCE, los bajos precios del petróleo y la depreciación del euro que impulsa las exportaciones.
El informe de previsiones económicas de la OCDE para 2015 (Economic Outlook) pronostica una mejora del déficit, al 4,4% del PIB este ejercicio y al 3% del PIB el próximo, pero la deuda seguirá subiendo, aunque a menor ritmo, hasta el 99,1% del PIB.