El primer gran libro de astronomía que se conserva fue escrito alrededor del año 150 por Claudio Ptolomeo, quien se cree que trabajaba en la legendaria Biblioteca de Alejandría. Aunque vivió en época romana, utilizaba para sus escritos el griego, lengua habitual en las clases cultas. Su título original es Mathematike Syntaxis, pero es más conocido por su nombre árabe medieval Almagesto. En esta obra, cuya influencia perduraría 1 400 años, Ptolomeo expone su modelo geocéntrico y un método para calcular las posiciones de los planetas, el Sol...